Regidores y locatarios del histórico inmueble presentaron ante la Legislatura de Zacatecas una contrapropuesta para evitar que sea entregado en concesión a Grupo Modelo.

Proponen que en el Paquete Económico 2016 se asigne una partida para la rehabilitación del Mercado González Ortega y una proyección comercial acorde a la vocación del Centro Histórico, no alineada a los fines de la cervecera.

Temen que se apruebe “fast track” la propuesta que beneficia a Grupo Modelo en el Cabildo de Zacatecas y luego en la Legislatura, declaró Hiram Galván Ortega, regidor capitalino por el Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Locatarios y cabildo desconocen los alcances del proyecto, pues solo en una ocasión acudieron representantes de la empresa y les presentaron información ambigua y raquítica, agregó el edil.

Expresó que les preocupa que se desprotejan los derechos de los locatarios y que se maneje el proyecto como un hecho cuando se desconoce y no se ha aprobado.

Afirmó que el municipio ha aportado 3 millones 600 mil pesos en este trienio para rehabilitaciones del Mercado González Ortega, por lo que podría inyectar más recursos sin entregárselo a la iniciativa privada.

Ojalá que los diputados tengan esa sensibilidad, para rehabilitar el mercado sin que la empresa sea la “dueña”, es más importante que el mercado siga siendo administrado por el municipio, agregó Galván Ortega.

Los inconformes reprobaron que les hayan llegado ideas dispersas y sin confirmar, por ejemplo que pretenden aumentar el número de locales de 29 que hay ahora a 46 pero de 2x2 metros y que la inversión no será de 30 sino de 60 millones de pesos.

Amedrentan a los comerciantes
Locatarios dijeron que los han reunido en 3 ocasiones pero no se ha presentado el proyecto integral, sólo trazos, figuras y “esperanzas”.

Acusaron que los amedrentan diciéndoles que la intervención de Grupo Modelo es lo mejor que les puede pasar.

Explicaron que las autoridades les dicen que con Grupo Modelo tendrían concesiones seguras por 10 años a través de la cervecera, mientras que con el municipio solo se les garantiza un año.

Una de las inconformidades es que con la cervecera tendrían un contrato entre particulares, en el que temen salgan perjudicados los locatarios.

Podrían ampararse contra desalojo ante instancias legales, y también prevén realizar una consulta ciudadana al ser la sociedad a quien le pertenece ese mercado.

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